El Naufragio del SS Dunraven en el Mar Rojo
El naufragio del SS Dunraven en el Mar Rojo es uno de los sitios de buceo más fascinantes y populares en Egipto. Este histórico barco, que se hundió en 1876, ofrece a los buceadores una increíble combinación de historia, aventura y vida marina.
Historia del Dunraven
El SS Dunraven fue un barco británico construido en 1873 en Newcastle upon Tyne por la empresa Mitchell and Co. Este vapor mixto, que combinaba la propulsión a vela y a vapor, tenía una longitud de 81 metros y estaba diseñado tanto para pasajeros como para carga. Propiedad de la naviera Willian Milburn and Company, el Dunraven era comandado por el Capitán Care, que aunque tenía amplia experiencia capitaneando barcos mercantes, en el momento del hundimiento solo había recorrido las aguas del Mar Rojo en dos ocasiones.
El viaje que llevó al Dunraven a su destino final comenzó en Bombay, India, el 6 de abril de 1876, con destino a Liverpool. Transportaba un cargamento de algodón, especias y madera, elementos cruciales para la industria y el comercio de la época. Durante su viaje, el barco hizo escala en Adén para recoger carbón y continuó su travesía hasta que se encontró con su destino fatal.
El Hundimiento, Rescate y Descubrimiento
El 25 de abril de 1876, alrededor de las 4:30 AM, el Dunraven chocó contra el arrecife Sha’ab Mahmoud en el Estrecho de Gubal, debido a una fuerte corriente que empujó al barco hacia el arrecife. La visibilidad era buena y el tiempo estaba en calma, pero la luz del faro de Ashrafi Reef no era visible, contribuyendo al desastre.
Todos los esfuerzos para liberar al barco del arrecife y mantenerlo a flote fueron en vano. A las 6 PM, el Dunraven finalmente se deslizó del arrecife y se hundió en las aguas del Mar Rojo. La tripulación abandonó el barco con provisiones suficientes y permaneció en un bote salvavidas hasta que fueron rescatados por pescadores locales, donde estuvieron con ellos hasta el 26 de abril, cuando fueron trasladados al vapor italiano «Arabia» y llevados a Suez.
Durante este tiempo, la tripulación fue tratada con gran amabilidad tanto por los oficiales italianos como por los pescadores locales, según relataron en sus informes. Posteriormente, el Capitán Care y su tripulación embarcaron en el vapor de la Peninsular and Oriental Steam Navigation Company, «Malwa», y regresaron a sus hogares en Southampton el 6 de mayo de 1876.
El Dunraven fue redescubierto en la década de 1970. La primera documentación del hallazgo se atribuye a un grupo de buceadores deportivos que exploraban los arrecifes del Mar Rojo. Sin embargo, no hay un registro específico del primer buceador que lo encontró.
Bucear en el Dunraven
En nuestra experiencia personal hemos buceado muchísimas veces en el Dunraven, es una de las inmersiones que más veces hemos realizado gracias a la posición del barco que se encuentra muy cerca de puntos de buceo mundialmente conocidos como pueden ser el parque nacional de Ras Mohamed y el naufragio del Thistlegorm. Si se desea bucear en el Dunraven, lo normal es hacerlo en los barcos de vida a bordo. Aunque logísticamente es posible llegar desde Sharm El-Sheik, es prácticamente imposible encontrar un centro de buceo de costa que organice salidas al pecio.
Datos de inmersión
Certificado: Advance +30 inmersiones de experiencia |
Profundidad min: 17m |
Profundidad max: 26m |
Corrientes: En ocasiones moderadas. |
Datos Técnicos
Posición: Shaa’ab Mahmoud |
Hundimiento: 1.876 |
Eslora: 81 m |
Manga: 9 m |
Exploración del Naufragio:
Para bucear en el Dunraven, normalmente nos trasladamos en zodiac hasta el punto de inmersión. Una vez allí, al ir descendiendo, empezamos a vislumbrar poco a poco el perfil del pecio. Es necesario bajar hasta los 15 metros para ver casi en su totalidad la silueta del naufragio completamente invertido, con la quilla hacia arriba. Es una vista impactante, ya que prácticamente todo el casco está colonizado por cientos de especies de corales duros y blandos.
Del exterior, podemos destacar la parte del castillo de popa, el timón y la hélice. Esta zona es excelente para la fotografía submarina, gracias a la visibilidad. Con el paso del tiempo, la imagen de la popa del Dunraven se ha convertido en un ícono del Mar Rojo, representando los naufragios y la vida coralina.
El interior del barco está casi vacío, excepto algunos elementos de la maquinaria, como puede ser el eje de la hélice (que recorre toda la quilla del barco y notablemente visible) o la caldera de vapor que tenía el barco para propulsarse. Si accedemos al interior del naufragio por la parte de popa, lo primero que nos sorprenderá es el espacio diáfano del interior que ha sido colonizado por corales y bancos de Salmonetes y Catalufas.
Si miramos hacia arriba, a lo largo de la quilla, podemos ver el eje y las tuberías del barco. Según vayamos avanzando en dirección a la proa, podremos disfrutar del juego de luces y sombras que se forman dentro del pecio debido a las aberturas que tiene el casco tras el choque contra el arrecife y que en prácticamente la totalidad del interior se pueden ver destellos de luz natural. Destaca la caldera del barco, perfectamente conservada y que hoy en día se puede ver con detalle.
Vida Marina en el Pecio y Arrecife:
Una de las mayores atracciones del Dunraven es la vida marina que se ha instalado alrededor del naufragio. Los buceadores pueden esperar ver una amplia variedad de especies de arrecife, destacando entre todas ellas ejemplares adultos de Napoleones que se pueden ver en los alrededores del naufragio. Los corales duros y blandos que crecen en los restos del barco añaden un colorido telón de fondo a la exploración submarina.
Aunque el barco tenga unas dimensiones considerables, deberemos dejar algo de tiempo de fondo para recorrer el arrecife de Shaab Mahmoud. Por norma general, una vez hayamos terminado con la exploración del barco, ascenderemos pegados al arrecife para poder observar las formaciones coralinas y la vida que alberga. El arrecife tiene un estado muy bueno de conservación y siendo el habita de muchas especies, entre las que podemos destacar, los Peces Piedra, Peces Mariposa, Peces Estandartes, Napoleones y en algunas ocasiones Tortugas.
Como conclusión, el Dunraven sigue capturando la imaginación de todos aquellos que se sumergen en sus aguas, rememorando la historia del naufragio y rescate. Este lugar no solo es un sitio de buceo, sino una cápsula del tiempo que conecta a los buceadores modernos con los marineros del pasado.